Como una aportación al entendimiento entre culturas, se podría calificar esta película egipcia de 2007. Laureada en varios certámenes en su momento (Canadá, Europa…), llevará al espectador a reflexionar sobre las relaciones humanas, el choque de culturas y la cultura en sí misma.

Una banda de música de la policía egipcia tiene que viajar a Israel para realizar un concierto. Perdidos en el trayecto en autobús, acaban alojados en un pueblo israelí perdido en el desierto. La estancia de los componentes de la banda, será el motivo para que su director y guionista Erna Kolirin, reflexione y especule sobre el amor, las relaciones sociales, la soledad y, sobre todo, sobre el choque de culturas. Eso que todos decimos saber pero que pocos acaban asimilando: lo parecidos que somos en el fondo a pesar de haber nacido y crecido en distintas culturas y lugares del planeta.

Una visión agridulce de las relaciones humanas. ¡Y con una banda de música como protagonista!